lunes, 26 de septiembre de 2016

¡ POR UNA EDUCACIÓN QUE NOS ENSEÑE A PENSAR Y NO A OBEDECER!

En la primera sesión de esta semana pasada, para empezar comentamos “Pedagogía del oprimido” un libro de Paulo Freire. Este autor, fue de los más influyentes teóricos de la educación del siglo XX.


En su libro hace una crítica a la educación. La cual concibe como si los alumnos fueran unos recipientes en los cuales se depositan los conocimientos, así, el maestro es un depositario y los conocimientos son los depósitos que realiza cotidianamente. Esto lo denomina como concepción bancaria, la cual pretende transformar la mente de los individuos para que sean pasivos, se adapten mejor y así poder dominarlos con mayor facilidad.


La pedagogía que propone Freire es opuesta a lo anterior, sugiere que el individuo aprenda estando con el mundo y no en el mundo, lo cual se alcanza a través de la liberación.
La educación liberadora tiene que superar la división existente entre el maestro y el alumno; dejar de lado la relación unidireccional por una direccional que contribuya a la educación integral de ambos, puesto que los dos pueden aportar a la enseñanza.

Paulo Freire pretende que el individuo se forme, no formarlo, para ello propone que aprendan en situaciones cotidianas, no cayendo en las experiencias artificiales de la educación actual. Un ejemplo de educación no formal, podría ser la Animación Sociocultural. Esta, contribuye a estimular la creatividad y el pensamiento crítico y propio de cada individuo, con ellos mismos y con la sociedad. Consiguiendo que el individuo sea un agente activo en su propia formación.


Tras la lectura de este un capítulo de este libro, los compañeros de clase elegimos una frase que nos llamase la atención y explicamos por qué. Con esto se consiguió generar un debate en clase en el que expusimos nuestras ideas sobre la educación actual y la sociedad en general, ya que nos sentimos identificados con lo que se exponía.

Para continuar, se nos expusieron las ideas principales de “Frankestein educador”. Un libro de Philipe Meireu que reflexiona sobre qué quiere decir educar y sus paradojas.

El autor nos habla de la paradoja de la educación como fabricación, que obliga a adherirte libremente a lo que proponen.

Lo que se plantea en el libro de Frankestein es hacer un cambio a la pedagogía: La educación solo puede escapar de las desviaciones simétricas de la abstención pedagógica de la fabricación si se centra en la relación del niño con el mundo. Para que este pueda reflexionar sobre el mundo y construirlo. La función de la educación es permitir a la persona construirse a sí misma como sujeto en el mundo, capaz de comprender el presente y de inventar el futuro.



Para ello el autor nos muestra una serie de exigencias, entre las cuales destacamos:

      - Darle la posibilidad de construir el mundo, ya que no es un objeto en construcción, sino un
            sujeto  que construye.

- Ser consciente de que no pueden pensar lo que quieres que piensen. De que ninguno puede tomar por otro la decisión de aprender.

- La transmisión de saberes no se realiza de una forma mecánica, supone la reconstrucción por parte del sujeto de saberes y conocimientos, que le servirán para su propio desarrollo.

- Cabe una pedagogía de las condiciones. El educador solo puede aspirar a crear las condiciones y dar las posibilidades para que los sujetos aprendan.

- El objetivo del educador es la autonomía de la persona a la que educa.

- Cabe asumir la insostenible ligereza de la pedagogía. No es una ciencia exacta. Se puede acercar pero nunca funciona igual porque las personas y los contextos son diferentes y están en continuo cambio.



Para concluir diremos que desde que nacemos se nos da una educación que nos dice como tenemos que pensar . Una sociedad que nos dice como tenemos que ser.
Podemos relacionar esta pedagogía con la Animación Sociocultural en la que se crean unas condiciones para que las personas participen y aprendan. Un animador tiene que “hacerlo todo sin hacer nada”, es decir, tiene que conseguir que las propias personas se organicen y sean capaces de hacer cosas por ellos mismos. No son quienes hacen sino que son quienes impulsan a las personas a hacer.


En la segunda sesión de esta asignatura, llevamos a cabo un taller de teatro en el que pudimos introducirnos en el mundo teatral. Donde vimos técnicas de improvisación, ayuda para el movimiento corporal, de relajación…etc.



En mi opinión esta es una buena manera para crear una mayor conciencia de grupo en el aula y favorecer a la participación individual y grupal. Así como también ayuda a reforzar la confianza y la seguridad en uno mismo.


Estas técnicas son de mucha utilidad en la Animación Sociocultural, ya que esta se encuentra dirigida a animar, dar vida y poner en relación a los individuos con ellos mismos, con otras personas y con la sociedad.

Desde bien pequeños estábamos acostumbrados a aprender lo que nos dicen que aprendamos sin cuestionarlo. Pero a cualquier persona se le tiene que enseñar a pensar por sí mismo, se le tienen que dar todas las opciones, para que más tarde logre desenvolverse en el mundo como agente de su propia vida y desarrollarse al máximo. Ya que decir que los individuos son personas y como personas son libres y no hacer nada para lograr que esta afirmación sea objetiva, es una farsa.

Por lo tanto la metodología y el marco de referencia de la educación tiene que ser construida por los individuos, como sujetos capaces de transforma su realidad. Potenciando su capacidad creativa y transformadora.


"La educación no cambia el mundo, cambia a las personas que van a cambiar el mundo" (Paulo Freire.)

sábado, 24 de septiembre de 2016

La Animación Sociocultural como elemento fundamental del Trabajo Social

A todo el mundo suele resultarle familiar las palabras "Animación Sociocultural" y, creer saber qué es lo que significa realmente y que hay detrás de tal profesión, porque sí, es una profesión, una profesión la cual siempre suele ir ligada a la connotación de "payaso o payasa profesional". Es una realidad, que la gran mayoría de personas que les resulta este término familiar, como antes anotábamos, suelen relacionarlo con la imagen del típico o típica payaso/a de una fiesta de cumpleaños. La Animación Sociocultural suele simplificarse a ese término disminuyendo así, la grandeza de tal profesión, sus posibilidades de beneficio en la sociedad además de pasar por alto, la gran funcionalidad que puede tener dentro del campo de intervención del Trabajo Social.


La Animación Sociocultural nace alrededor de los años 60, como un instrumento de movilización colectiva y como una herramienta cultural para una sociedad inmersa en una época industrializada. Se desarrolla a raíz de varios movimientos y organizaciones juveniles debido a que la sociedad estaba cambiando, estaba evolucionando hacía nuevos tiempos generando así, nuevas problemáticas sociales las cuales, podían darse respuesta a través de la Animación Sociocultural. Considerada como un modelo de intervención, puede contribuir a la hora de desarrollar aquellas situaciones o procesos necesarios para conseguir la movilización de las personas y de ese modo, cambiar conjuntamente los problemas. Trata de promover la participación, dotando a los sujetos de las herramientas necesarias para conseguir su motivación y de ese modo, ser los propios protagonistas del cambio. Como se observa, basa sus técnicas es una metodología creativa en donde la cultura y la educación son pilares fundamentales en el desarrollo de sus actividades.
También es muy importante tener en cuenta el papel del animador/a sociocultural, y sobre qué bases se desarrolla su perfil profesional ya que debemos de resaltar la existencia y origen de la Animación Sociocultural en los paradigmas de las Ciencias Sociales. En general, podemos situarnos en tres paradigmas concretos donde la Animación Sociocultural y el/ la profesional, pueden situarse. Destacamos por lo tanto, el paradigma tecnológico, interpretativo y crítico en donde cada uno desarrolla, una perspectiva de la funcionalidad y la práctica de la Animación Sociocultural así como, el perfil profesional o características que debe de poseer la persona que pone en práctica las acciones de dicha profesión.
Dado que, mucha de las bases y técnicas que emplea la Animación Sociocultural son compartidas por la propia práctica y disciplina del Trabajo Social, puede ser de gran utilidad a la hora de desarrollar ciertas acciones en una intervención. Se pueden generar grandes cambios a través de la dinamización de la cultura, componente fundamental en la práctica profesional de la Animación y, se pueden llegar a cumplir muchos objetivos utilizando como nexo de unión la cultura en todos sus ámbitos. Una parte fundamental del Trabajo Social es buscar es motivación que incite a la participación para así conseguir acciones colectivas que generen cambios, o de actitudes o de situaciones por ello, cabe destacar el gran papel que puede tener la Animación Sociocultural en la práctica profesional del Trabajo Social.




Para finalizar con la entrada semanal añadiremos un video en el que de forma resumida explica en que consiste un Animador/a sociocultural y cuales deben ser sus habilidades y destrezas a la hora de la practica profesional asi como las funciones que se suelen realizar. También os animamos a que visiteis la página "La animación sociocultural. Recursos para animación sociocultural, gestión de grupos y liderazgo grupal", en la cual podemos encontrar diferentes recursos tanto teóricos com prácticos que pueden ser de gran utilidad en un o una animador/a sociocultural.

https://animacionsociocultural.wordpress.com/


"Utiliza tu imaginación, no para asustarte, sino para insipirarte a lograr lo inimaginable"